Sobre la obra

“Nuestras raíces son atólicas. Educados en el seno de una cultura cristina, hemos convivido cotidianamente con un montón de símbolos religiosos. Colm Tóibín ha puesto el foco en uno de ellos: la Virgen María. Y nos descubre que detrás de ese icono de la Virgen hay un ser humano. María de Nazareth. Una sencilla mujer de campo, cuyo único hijo le es arrebatado por una decisión divina que no comprende y por un terrible odio humano que le inflige el mayor de los dolores al clavarlo en una cruz.

El texto de Tóibín nos llega  a nosotros con la voz y la figura de Blanca Portillo. En esta actriz descansa la parte primordial del trabajo. Es un monólogo complejo y con muchos matices. La emoción en estado puro, sin artificios, es lo que debe prevalecer, eliminando todo lo que nos separa de ese sentimiento enfebrecido.

La escenografía de Frederic Amat convierte el exilio, en su casa de Éfeso, en una especie de habitación-retablo de la memoria. En ella nuestro personaje, ya en la vejez, revive momentos de su vida. Hermosos algunos, terribles otros. Y los recrea como si en sus solitarias y largas noches diera forma a esos fantasmas del pasado y con ellos nos descubriera la mujer que realmente es, no la que toda la humanidad ha querido hacer de ella”.

Agustín Villaronga

Duración

1 hora y 5 minutos

Estreno absoluto

17 Julio 2014
Grec Festival, Barcelona

“En este monólogo de setenta minutos aherrojado de clavos, sangre y lágrimas, la Portillo -me van a permitir el “la” admirativo- da un paso más en una carrera plagada de éxitos. Todo ayuda a que haya teatro más allá del texto, a que un monólogo se convierta, apoyado en una actriz, en un diálogo con la escena”.

Miguel AyanzLa Razón

“Tóibín construye un relato fascinante desde el punto de vista dramático, que propone otra visión, rebajada de énfasis religioso. El montaje bascula en torno a otra diosa Blanca, la Portillo, aclamada por el público. La formidable actriz realiza una interpretación eminente”.

Juan Ignacio García GrazónABC

“Actriz y director han entendido perfectamente los conflictos del texto y los llevan a la escena con absoluta fe, sin caer en ningún momento en el distanciamiento ni la ironía. Blanca Portillo enfoca su trabajo primero haciendo creíble su personaje de mujer anciana y exiliada del siglo I y luego dándole carne al rol de madre que sufre y quiere pero no puede proteger a su hijo”.

Nacho CabanaRevista Tarántula

Ficha artística

De Colm Tóibín
Dirección Agustí Villaronga
Intérprete Blanca Portillo
Traducción Enrique Juncosa
Escenografía Frederic Amat
Composición musical Lisa Gerard
Iluminación Josep María Civit
Vestuario Mercé Paloma
Sonido Lucas Ariel
Atrezzo Jordi Vera
Productor Javier Pérez Santana
Ayudante de dirección Martí Torras

Producción: Testamento
En coproducción con: Centro Dramático Nacional, Festival Grec y Avance Producciones Teatrales
Con la colaboración del: MACBA (Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona)
Con la ayuda de la: Generalitat de Cataluña